Reparación básica del césped deportivo, por Antonio Sánchez

¿Has imaginado alguna vez que después de un largo de día de trabajo en la oficina, tu jefe destroce ese dossier, documento o artículo que tanto tiempo y esfuerzo ha requerido? A ese problema se enfrentan los encargados y trabajadores de instalaciones de césped natural, no importa si se ha jugado un partido de fútbol o rugby, el terreno acabará dañado. Pero, ¿qué labores se realizan en los estadios para que después de 90 minutos de uso el campo luzca espléndido para el siguiente encuentro? Las labores son innumerables y dependerán del país o instalación deportiva. En este artículo nombraré las más comunes:

Reparación manual: Es la labor más popular en todos los terrenos deportivos. Con rastrillos o utensilios especiales se cierran las “heridas” producidas por las botas de los jugadores y se realiza después de cada partido o entrenamiento. Si los daños, por su tamaño no pueden ser reparados con herramientas, estos de deben de cubrir con una mezcla de arena, turba y semilla. A pesar de su sencillez, es sumamente importante para que los terrenos aguanten en las mejores condiciones posibles a lo largo una temporada.

Semilla pregerminada: A la mezcla de arena, turba y semilla mencionada anteriormente se le puede añadir semilla pregerminada. Existen varios procesos para pregerminar la semilla (el más conocido es su inmersión en agua) y con ello, la planta emergente llegará a un estado adulto mucho más rápido que una semilla convencional.

Tapones: En ciertos terrenos deportivos y debido al metabolismo del césped, no podemos utilizar semilla para reparaciones. En su caso usamos pequeños trozos de césped, no mayores de 9 cm2, que poco a poco colonizarán con estolones y rizomas las zonas sin densidad o dañadas.

Interseeding: Se trata de realizar una siembra sobre una superficie de césped ya establecida para ganar en densidad. Esta labor se debe de realizar cuando las condiciones climatológicas sean benignas y hagan posible la germinación de la semilla implantada. Se puede sembrar la totalidad del terreno o únicamente zonas localizadas que han sufrido un fuerte daño, por ejemplo, las áreas de los porteros.

Tepeado: En ocasiones los terrenos deportivos tienen un desgaste o daños irrecuperable por un uso muy intenso, por extremos de temperaturas, plagas… En estos casos una labor muy común es usar tepes con un espesor comprendido entre 3 y 5 cm. La ventaja de esta labor es su rápida instalación  y puede acoger partidos en un corto periodo de tiempo (incluso solo varios días después). Al igual que el interseeding, esta tarea se puede realizar en un área localizada o en la totalidad de los terrenos deportivos.

Antonio Sánchez
Head Groundsman
Ciudad Deportiva Villarreal CF